Compré The Shack, -en castellano publicado como La Cabaña-, tentada por la sinopsis, a pesar que no conocía a su autor, William Paul Young.
Mi edición de 2007 promociona una impresión de 3.000.000 de ejemplares, lo cual debe haber ascendido bastante al día de hoy; sentí curiosidad por saber más acerca de los entretelones del libro e investigué en Internet cuál sería la razón para el éxito de un argumento muy sencillo: un hombre que tiene 5 hijos recibe una breve carta de ¨Dios¨ -luego de tres años que su hija menor fuera raptada y asesinada- para encontrarse con Él en la cabaña en ruinas donde fuera encontrado su vestidito ensangrentado.
Resultó que Mr Young es hijo de misioneros y en algún lugar leí que fue abusado sexualmente (desconozco si esto es cierto, en el libro el padre de Mack le pega con brutalidad); que Young no es especialmente religioso pero luego de varios hechos desafortunados, ya casado y con seis hijos, decide escribir La Cabaña para sus hijos y dos amigos pastores.
Los pastores leen el texto y coinciden en que debiera publicarse. Para ello hacen una sociedad -Windblown Media- y aportan sólo 200 U$S. Lo más importante es que el libro comenzó a recomendarse y regalarse en las Iglesias cristianas, y así, de boca en boca, llegó a estar en el ranking de los New York Best Sellers. A partir de allí, los intereses financieros cambiaron y Young entró en juicio con la sociedad editorial, finalmente el juez da el caso por nulo o desierto.
Muy interesante.....
William Paul Young. Imagen bajada de http://blog.al.com/living-news/2009/09/bestselling_author_william_pau.html
Si Ud quiere leer algo para entretenerse en la playa, este libro no es para Ud, la particularidad es que es aburrido; sin embargo hay gente que clama que le ha cambiado la vida, mientras unos pocos lo declaran ¨herético¨. Veamos porqué:
Antes del comienzo del ciclo escolar, Mackenzie lleva a tres de sus hijos de campamento. Dos de ellos tienen un accidente en una canoa, mientras va a rescatarlos, la pequeña de seis años -Missy- es raptada. Se inicia la búsqueda y sólo descubren su vestido ensangrentado en una cabaña alejada. Al cabo de un tiempo considerable, la pequeña es dada por muerta, aunque su cuerpo no ha sido encontrado. Tampoco el de las otras niñas que han desaparecido a causa del mismo asesino serial.
La pena agobia a la familia, fundamentalmente a Mack y a Katie, la hermana que estaba en el campamento, quienes se consideran culpables de no haber podido evitar el desenlace.
Al llegar esta carta de ¨Dios¨, a quien familiarmente se lo llama ¨Papa¨, Mack decide volver a la cabaña, incluso si se encontrara con el asesino. Para ello, aprovecha un fin de semana en que su esposa visitará a su hermana con sus hijos. Pide prestado un Jeep a Willie, su mejor amigo y ¨autor¨ del relato y parte sin mayores explicaciones, llevando sólo algunas provisiones y abrigos para protegerse del frío.
Sin embargo, al llegar, el paisaje ha cambiado en un marco primaveral de olores y colores que lo llenan de recuerdos; la cabaña está impecable y quien lo recibe es una mujer gorda y de color (!) que se presenta como ¨Papa¨ o Dios Padre. La acompañan un hombre, Jesús -quien parece un carpintero árabe de nariz grande- y una joven asiática, el Espíritu Santo.
Parece una burla, pero Dios le pregunta porqué lo había personalizado como un ser viejo (después de todo Él no tiene cuerpo), y Jesús hijo de judíos, porqué debiera ser un joven rubio y apuesto?
En principio lo que más le impacta a Mack es el amor y camaradería que se profesan uno al otro. Luego de una suculenta comida, y preguntas y respuestas -porque Dios baja al nivel de la humanidad de Mack para poder hacerle preguntas de las cuales ya sabe la respuesta- a la manera de un padre jugando con su niño, Mack va a dormir y pasa todo el día siguiente en compañía de cada uno de los representantes de la Sma. Trinidad que le hablan de amor y perdón.
La gran cuestión, es porqué Dios permitiría semejante barbarie en una niña inocente o tanto dolor en tanta gente inocente, pensemos en guerras, enfermedades, etc....... Queda entendido que Dios ama a sus hijos de la misma forma que Mack ama a los suyos; cuando alguno de ellos obra mal, aún se lo perdona y el mal en la tierra no es su quehacer, sino el del demonio y la maldad de los hombres. Por supuesto, Él puede evitar que suceda algo malo, pero no necesariamente; a veces lo malo sirve a fines de lograr algo bueno, como sea, Dios - en sus tres formas- jamás abandona a sus hijos.
Es aquí cuando a Mack se le permite ver la felicidad de su hija muerta, jugando con Jesús y con sus hermanos, quienes en ese momento están soñando. Y vaya, esta parte me hizo derramar lágrimas; justo antes de esto ya estaba pensando en dejar de lado este libro, lo que no suelo hacer, pero me atrapó otra vez y me pasé más de cuarenta minutos lagrimeando.
Una conversación importante y creo que por allí viene la crítica de la herecía, es que Jesús dice que la Biblia no habla de reglamentos (refieriéndose a la misa y entiendo que a los sacramentos), que los ritos han sido impuestos por las instituciones y que la iglesia no es concurrir a un edificio sino compartir la vida y dar lugar a Dios en el corazón, por medio del perdón. Lo cual, es un alivio para Mack que no suele ir a misa o cual fuera la reunión de fieles de su religión (que no me queda claro, tal vez sea cristiana, pero se habla en general).
Antes de dejar ir a Mack, le muestran al espíritu de su padre fallecido, y ellos hacen las paces (luego de una gran paliza, Mack había puesto veneno en sus botellas de vino); además Papa, lo fuerza a perdonar al asesino de su hija (perdonar es dejar ir, pero no olvidar, para que la gran pena no consuma nuestras vidas) y ya, en un cuerpo de anciano con blue jeans, camisa arremangada y colita hippie en el pelo, lo conduce a la caverna donde yace el cuerpo de su hija.
La historia termina en que Mack tiene un accidente, que en realidad fue el día viernes y ha pasado cuatro días en coma; esta experiencia mística los doctores la atribuyen a la morfina y el trauma, sin embargo, luego de su recuperación Mack lleva a la policía a buscar el cuerpo de Missy y tras encontrar huellas del criminal, lo ponen preso y encuentran los otros cuerpos de las víctimas. Todo muy sencillo y sin ningún detalle truculento.
La trama está muy lejos de ser un libro de suspenso o policial; la muerte de Missy podría haber sido provocada por un accidente y daría lo mismo, siempre y cuando haya un culpable a quien perdonar.
El libro, a pesar de tener muchas partes aburridas por la falta de acción sumado a los diálogos ¨que se ven venir¨, es muy interesante desde el punto de vista creativo y reconozco que me ha dejado pensando, en el punto de vista de cómo sufrimos a pesar de la bondad de Dios.
Agregado en la edición de 2009:
I wanted to add some additional information, yet retain my original review intact. Here is a statement I made in the comments in response to someone’s elses comment. I think it helps clarify the above:
A Quick Follow-up on my review….
Every reader is going to find some challenges to their theology in this book – including me.
People will have problems with his use of a woman to represent Father God, his view of the church, his lack of a Reformed approach to God’s dealings with man, etc.
My encouragement for people to read this book, does not mean I don’t see problems with it. It just means that I think he makes some good points and uses a great story to make them.
He also deals with age-old questions that some will agree with him on and some won’t. For example, as you point out, the problem of evil. Everyone will have a different theological answer for this (thus the phrase ‘problem of evil’).
So, read the book with your eyes wide open, but I still say, “read the book.”
Para mayores explicaciones sobre las críticas de ¨herecía¨, lean este artículo de la editorial: