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Monday, March 14, 2011

Acerca del plagio de textos on line

Imagen bajada de bibliotequices.blogspot.com

Hace unos meses, contaba en un post sobre el libro de Bush cómo se lo ha criticado por copiar a otros autores. No es tan sencillo plagiar al día de hoy, tan avanzados están los buscadores. Basta poner un par de frases en el buscador, y aparecerán los documentos que las  incluyen on line, así, los mismos autores o sus agentes pueden verificar rápidamente si han sido ¨copiados¨, o hasta qué punto.
A mí me ha sucedido, por parte de una colega, y la experiencia es dolorosa, injusta y vergonzosa. Porque se supone que un profesional, un investigador, se puede apoyar en otros textos, pero corresponde, citar las fuentes estrictamente. Y siempre, en los papers de congresos, publicaciones profesionales en general, aparece -obligatoriamente- el email del autor, al que podemos pedir permiso directamente.
Internet es un paraíso de papers, muchos gratuitos, una gran ayuda a la hora de escribir una tesis; sin embargo, no todos los tesistas son serios a la hora de escribir; Juana Libedinsky, en su artículo basado en otro del New York Times, da ejemplos muy críticos:
¨Atrás quedaron los días en los que Joe Biden, actual vicepresidente, podía resucitar una carrera política a pesar de que se había probado que había copiado párrafos enteros de un discurso ajeno para presentarlo como propio en un acto. Ya en las últimas elecciones locales, en cambio, el candidato a gobernador de Colorado fue torpedeado porque un manuscrito que le encargó una fundación conservadora, y por el cual le había pagado 300.000 dólares, resultó ser un plagio.
Por supuesto, esto no es nada en comparación con lo que está ocurriendo de este lado del Atlántico. Theodore zu Guttenberg, el Kennedy alemán, firme candidato a suceder a Angela Merkel, debió renunciar por tomar prestado de otros autores parte de su tesis de doctorado. Y un hijo de Khadafy, Saif-al Islam, que era presentado como una esperanza más abierta y moderna del régimen, está también en la mira: la London School of Economics analiza serias acusaciones de plagio, también en su tesis.
Puede no haber sido el peor golpe que la familia del mandatario libio haya recibido estas últimas semanas, pero fue durísimo para la institución. Cuando esto se sumó a las revelaciones sobre las donaciones vinculadas al régimen libio que recibió la universidad, el presidente de la institución británica dejó el mando y el mundo académico se vio profundamente sacudido.¨
Dicen que cuando el texto no está registrado o con número ISBN, el plagio no cuenta. Desde mi punto de vista, es una cuestión de conciencia, ética y profesionalismo que va más allá de los registros. 

2 comments:

  1. Hola Myriam:
    Muy interesante el asunto del plagio en tiempos de internet. Como bien concluyes en este asunto están involucrados la conciencia, la ética y el profesionalismo. Es vergonzoso que políticos y funcionarios públicos sean incapaces hasta de leer lo que sus asesores o grandes empresas les preparan para que "saluden con sombrero ajeno", como si las ideas fueran propias, pero qué tal a la hora de disponer de los recursos de sus pueblos, para eso ni asesoría necesitan.
    En fin, que internet sea un espacio de libertad, de difusión de ideas que viajan libremente es maravilloso, que aprendamos a usarlas es el gran reto.
    Va un cariñoso abrazo.

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  2. Gracias por tu comentario tan ilustrativo, tienes razón María Eugenia. A mí, Internet me ha sido de gran ayuda en mi investigación, y me siento agradecida a todos los profesionales que intercambian información académica, y a los amigos virtuales que nos apoyan día a día.
    Si querés reirte un rato, leé el post del libro de Bush, es increíble...
    Un beso,

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